En contraste con la parte vieja de Barcelona, las calles arboladas de ordenado trazado de la parte alta de la ciudad tienen un ambiente residencial. En una de ellas encontramos un piso de los años sesenta del siglo pasado que conservaba el suelo hidráulico original característico de tantas viviendas de la ciudad.
En lugar de modificar drásticamente la distribución original, Arquitectura G contempló este proyecto como un ejercicio de superposición de elementos sobre una preexistencia, con la intención de crear una vivienda contemporánea que preservara el valor histórico del inmueble. Para ello instalaron paredes no estructurales que, al no llegar al techo, permiten la continuidad de la luz entre la fachada principal y la posterior iluminando todas las estancias.
En la parte posterior de la vivienda, aprovechando las grandes ventanas que había en ella (que dan a uno de los característicospatios interiores de Barcelona), Arquitectura G creó un espacio para la vida social. Se instaló una “isla” para el espacio de la cocina y la televisión. Frente a ella, una pared que discurre en diagonal, en la que se ha colocado el sofá, rompe la geometría del suelo preexistente y añade un toque de creatividad al espacio.
Los dormitorios ocupan la parte delantera de la vivienda, en la que ha construido un cuarto de baño en un núcleo central.
Elegimos materiales que complementan el suelo hidráulico existente, descontextualizándolo con paneles verticales de color liso que reflejan los tonos y proporciones de las baldosas hidráulicas.
Promotor: Casas Lautes
Arquitecto: Arquitectura-G
Constructor: Obras Diaz
Socio Inversor: Cadmus Investment Group
Venta y Marketing: Carolina Marti
Fotos: Jose Hevia